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jueves, 9 de junio de 2011

La disputa y la discordia

Estimados lectores:

¿En cuantas ocasiones nos hemos vistos inmersos en situaciones que van de lo sencillo a lo complicado por la falta de consensos, acuerdos ío diálogos?

La siguiente fábula (adaptación de Esopo) nos puede dar una pequeña luz y entendimiento para mejorar nuestras relaciones interpersonales y profesionales, espero que sea de su agrado.

Cierto día, caminaba Hércules el gran semi dios por el sendero que lo llevaría a la siguiente ciudad y hazaña cuando de repente, bajó la vista y se topó con un objeto similar a una manzana y decidió aplastarla. Al hacer esto, el objeto creció en tamaño y forma como retando al gran héroe a que le mostrará todo lo que se hablaba de él.

Enfadado por el reto, Hércules tomó su mazo y asestó un brutal golpe para de una vez por todas acabar con el insulso objeto, para su sorpresa, éste creció de tamaño con tal magnitud que le impidió seguir avanzando en su camino.

Antes de que el mítico héroe descargará más su furia, se le apareció Atenea y con voz tranquilizante le dijo:

¡Tranquilo hermano del Olimpo!, el objeto que ves a tus pies es la disputa y la discordia, cuando no se le toma en cuenta permanece en su estado original, pero si se le toca, mira hasta donde puede crecer...

Contra esta terrible "actitud" tan beligerante que a ningún destino nos lleva, siempre debemos mantenernos ecuanimes y serenos, los problemas interpersonales siempre tienen una solución cuando nos mostramos acertivos y cordiales.

Toda situación difícil que se presente en nuestro actuar cotidiano tiene una solución cuando aprendemos a dialogar y crear consensos, no olviden que una actitud "ganar-ganar" para todas las partes impedirá que se presente este terrible mal que es la disputa y su hermana la discordia y que de paso se lleve todo lo valioso que tenemos como seres humanos: La comunicación.

Espero que haya sido de su agrado.

CPC y MI Juan Gabriel Muñoz López
Consultor

Twitter: @gabriel_fiscal


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